Gracias al apoyo económico de la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo, más de 200 personas migrantes venezolanas en tránsito han podido acceder a condiciones dignas y seguras en la ciudad fronteriza de Tacna, Perú. El proyecto “Acción Humanitaria para la atención inmediata de personas migrantes venezolanas en Perú, con enfoque de género y derechos humanos”, impulsado por Madre Coraje en alianza con Cáritas del Perú, Cáritas Tacna, Cruz Roja Peruana, la Municipalidad de Tacna y el Grupo de Trabajo para Refugiados y Migrantes, ha habilitado un Centro de Atención Diurna, un espacio de respiro donde familias y personas migrantes encuentran servicios básicos de agua, saneamiento e higiene.
En este centro, los beneficiarios pueden acceder a baños y duchas diferenciados por sexo, lavaderos, lavadoras y áreas de secado, además de conectividad wifi, puntos de carga de celulares e hidratación. Estos servicios, además de cubrir necesidades físicas inmediatas, contribuyen a recuperar la dignidad y el bienestar emocional de quienes llegan tras recorrer rutas largas y peligrosas.
Hasta la fecha, 147 personas han recibido servicios básicos de higiene y se han repartido también 125 kits de higiene diferenciados para mujeres y hombres, distribuidos tanto en el Centro de Atención Diurna como en puntos externos estratégicos. La coordinación interinstitucional y el trabajo de campo han permitido superar las limitaciones del contexto y asegurar que la ayuda llegue en el momento y lugar en que más se necesita.
“El apoyo del Principado de Asturias ha sido esencial para mantener este espacio de acogida, que no solo brinda servicios básicos, sino también esperanza y acompañamiento a quienes siguen buscando un futuro más seguro y digno”, señala Gloria Díaz, Responsable de Acción Humanitaria de Madre Coraje.
En un escenario marcado por la movilidad humana y la vulnerabilidad, este proyecto se consolida como una respuesta humanitaria flexible y eficaz, que pone en el centro la dignidad y los derechos de las personas migrantes.